WordPress ha perdido su esencia
WordPress nació como una alternativa, allá por los inicios de los años 2000, para que todo el mundo pudiera tener su propia "página web", pero lo que en realidad le dio la fama fue la posibilidad de crear un blog de una forma realmente sencilla, así que podríamos decir que WordPress fue creado pensando en eso. Esto permitía compartir nuestras ideas/artículos en Internet sin demasiadas complicaciones (también estaba Blogger, pero su uso era más reducido), y un servidor tuvo en su día su primer blog donde iba publicando varios artículos de forma más o menos (menos) constante.
Vayamos al año 2006-2007
En esos años fue cuando pude empezar a experimentar con WordPress, y dependiendo de la opción elegida (wordpress.com o wordpress.org) teníamos más o menos opciones, pero en esencia era tan simple como elegir un nombre para el blog, escoger una plantilla que nos gustara y empezar a publicar. Si teníamos algo de maña podíamos modificar esas plantillas, pero normalmente ya aportaban lo necesario para tener un blog aceptable.
Recordemos que estamos hablando del año 2006, con lo que el diseño que las webs era el que era, pero la verdad que con unos pocos clics el resultado era más que decente, y alguien sin mucho conocimiento podía crear su propio espacio y empezar a escribir.
Realmente era muy fácil tener un blog en Internet.
Volvamos ahora al 2022
Tras un tiempo apartado de la llamada "blogosfera", al decidir retomar esta afición, obviamente lo primero que hice fue descargar WordPress y ver qué ofrecía después de casi 10 años.
Lo primero que pensé fueron 3 cosas:
- Las plantillas por defecto son muy cutres.
- Necesito un curso de WordPress.
- Esto no es lo que era.
Y ahí fue donde me di cuenta de que WordPress había dejado de ser una plataforma para que cualquiera pudiera ser "autosuficiente". Y con esto no quiero decir que sea ni bueno ni malo, simplemente que ya no es tan accesible como antes.
Estuve intentando usar, como antaño, las plantillas básicas para ver qué tal, y si bien son más o menos funcionales, dan la sensación de estar sin terminar o que se han quedado ancladas en el pasado en cuanto a diseño. De verdad que viendo cómo ha evolucionado la web, son plantillas demasiado cutres tal y como están por defecto, hablando claro.
Y bueno, intentar modificarlas con el nuevo editor es una experiencia bastante cercana a sufrir un pequeño infarto; puede que ofrezca mucho, pero para utilizarlo ármate de paciencia. Lo de hacerlo intuitivo se les ha olvidado.
De usar una plantilla de la tienda ya ni hablamos. Las fotos que se ven en las vistas previas son una maravilla, pero al aplicarla... Que si necesitas el plug-in tal, que te hace falta añadir cuál, y cuando lo tienes todo, llama al experto para que te lo ponga mínimamente decente. O eso, o te quedas con ese blog "a la antigua y sin terminar", porque el editor de estas plantillas tampoco es que mejore al editor de plantillas básicas.
Y eso si encuentras una específica para blog, porque me atrevería a decir que el 90% están pensadas para e-commerce o similares.
Muchas opciones. Muchas complicaciones
Esa es la sensación que me ha dado esta nueva versión de WordPress. Alguien con cierto conocimiento y experiencia puede llegar a aprovechar lo que ofrece, pero sin ese perfil estás vendido. Plug-ins, SEO, Backups, Menús, Widgets, Editores de temas, Editores de temas 2, Editores de temas 3...
Se ha convertido en una herramienta que requiere de demasiada paciencia, demasiada experiencia y demasiados conocimientos para poder publicar un simple blog. Ha crecido de tal manera que abruma tan solo de entrar al panel de administración a la que quieres modificar algo.
Tras estar toda una tarde trasteando, investigando y toqueteando, no conseguí encontrar una plantilla que fuera lo suficientemente sencilla, pero a la vez práctica. Y eso es algo realmente frustrante cuando estás usando una herramienta que se supone que te tiene que facilitar las cosas, así que me tocó investigar alternativas.
WordPress ya no es lo que era
Y lo digo así de claro. WordPress ya no es esa plataforma para poder crear tu blog, es una plataforma para que alguien te monte lo que quieres.
Sí, en pocos clics vas a poder tener un blog y subir tus cosas, pero quien entre en ese blog tendrá la sensación de que está hecho rápido y mal.
WordPress ahora es una plataforma donde podrás alojar tu blog, tu página web, tu tienda digital, la página de tu restaurante, montar tu propia galería de fotos o incluso, si quieres, tu recetario de cocina, pero para ello necesitarás un experto en WordPress que te lo haga, o deberás convertirte en uno. Y eso no se consigue ni en una tarde ni con unos pocos clics.
Si quieres montar un blog rápido, sencillo y elegante, mejor busca otra alternativa. Si quieres pasarte horas y horas configurando cosas, añadiendo parámetros SEO, ajustando plug-ins, y retocando el diseño, entonces prueba WordPress, pero puede que te quedes sin pelo.